Algo que nunca puede faltar en las vacaciones de verano, en la piscina, la alberca y obviamente en la playa, es el bikini; es por eso que hoy lo festejamos en su día.
La prenda de baño por excelencia fue creada por el ingeniero francés de automóviles, Louis Réard, y presentada el 5 de julio de 1946 en un evento de moda en Piscine Molitor (una piscina pública popular en París).
Réard no encontraba a ninguna modelo que se atreviera a usar el bikini, y fue así como contrató a Micheline Bernardini, bailarina nudista del Casino de París, quien sí se atrevió a ponérselo, pasando a la historia como la primer mujer en usar un bikini.
Como dato curioso, Bernardini recibió unas 50.000 cartas de admiradores después de la presentación.
A lo largo de la historia, esta prenda ha sido amada y odiada, aceptada y rechazada. Por cuestiones “morales” y hasta religiosas, su uso fue prohibido y censurado, claro está el ejemplo del Vaticano, quien lo consideró “pecaminoso” y prohibió su uso en países como España, Italia y Bélgica.
Fue hasta los años 50’s cuando poco a poco fue aceptado y usado por algunas de las mujeres más hermosas de aquella época, como Marilyn Monroe o Brigitte Bardot, quienes pusieron de su parte e hicieron de esta prenda algo popular.
Pero… ¿por qué bikini? Su inventor lo nombró así en honor a un conjunto de pequeños arrecifes de las Islas Marshall, en el Océano Pacífico, donde el ejército de los Estados Unidos realizó pruebas nucleares.
De distintas formas, colores, tallas y modelos, el bikini hoy en día es una prenda indispensable que no debe faltar en el guardarropa de cualquier chica.